Amor Incondicional: El Único Sentido de la Cruz
- Alejandra Sandoval Crespo
- 16 abr
- 1 Min. de lectura

Tampico, - Tam. Semana Santa solo tiene sentido en el AMOR, con mayúsculas. Porque, ¿Qué puede llevar a un Dios a hacerse hombre y venir a salvarnos? ¡Solo el AMOR! Ese AMOR incondicional que tiene por cada uno de nosotros.
Un Dios que caminó sin separarse de la Cruz, desde Belén hasta Gólgota... Un Dios que quiso llorar, experimentar la soledad, la traición de los amigos, el abandono de quienes AMABA, el miedo y el extremo del dolor y la crueldad escondida en el corazón del hombre. Un Dios que hizo una locura de AMOR misteriosa, impensable. Un Dios, que se entregó TODO y no se reservó nada, sin ningún otro interés que AMARTE.
Vivamos el sentido de estos días Santos desde los ojos del AMOR. Seamos capaces de contemplar el sacrificio de la Cruz, que comienza en la última Cena, sabiéndonos AMADOS. Con un AMOR que nos ganó la redención, que se anonadó a sí mismo hasta la muerte.
Cristo te AMA. Cristo se te ha entregado. Cristo te espera y tiene sed. Sus labios andan resecos reclamándote. Y El no se conforma con un poco de ti, ¡LO QUIERE TODO! Te quiere completo, a pesar de nuestras miserias, nuestro pecado, nuestra humanidad, nuestras traiciones y negaciones, nos sigue AMANDO y no es capaz de dejarnos de AMAR.
Desde la Cruz te reclama: ¡DAME TU CORAZÓN! Y te entrega el Suyo.
¿Acaso es pedirte mucho que AMES a aquel que hasta el extremo te AMÓ y te sigue AMANDO?