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En un ambiente lleno de fe y emoción, el Padre Antonio Izaguirre, fue recibido como nuevo párroco de la Parroquia de San José. La Misa de Toma de Posesión fue presidida por Monseñor José Armando Álvarez Cano, Obispo de Tampico, y tuvo lugar en un día muy especial, la fiesta de San Rafael Guízar y Valencia, patrono de los obispos de México, lo que añadió un simbolismo profundo a la Celebración.
Durante la homilía, Monseñor Álvarez Cano destacó la misión esencial del sacerdocio, resaltando la imagen del Buen Pastor como modelo a seguir. “Si hay una imagen con la que el sacerdote debe identificarse siempre es con la del Buen Pastor”, señaló Monseñor, refiriéndose a la figura de Jesús como guía y protector de su rebaño.
Monseñor continuó subrayando el sacrificio diario que representa el ministerio sacerdotal. “El Buen Pastor da la vida por sus ovejas, no es un servicio personal, sino una entrega total al ministerio pastoral de Jesús”, afirmó, invitando a todos los sacerdotes a recordar que su misión es llevar sanación y conocimiento de Dios a todos los hombres.
El Obispo también resaltó la cercanía que debe existir entre los sacerdotes y su comunidad. “El Papa nos recuerda que los sacerdotes debemos ser cercanos, debemos conocer las alegrías y las penas de nuestras comunidades. Conocer a nuestras ovejas por su nombre, y ellas deben conocer a su pastor”, reflexionó, alentando a los fieles a estrechar lazos con sus parroquias y sacerdotes.
Al finalizar la ceremonia, el Padre Toño agradeció la oportunidad de servir a la comunidad de San José y se comprometió a seguir el ejemplo del Buen Pastor en su ministerio, guiando con dedicación y amor a su rebaño.
La comunidad de San José, emocionada y llena de esperanza, dio la bienvenida a su nuevo párroco en esta jornada tan especial, confiando en que su liderazgo espiritual fortalecerá aún más los lazos de fe y unidad.
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