Cinco Razones para no Preocuparse

Personas felices, sin preocupaciones

La vida está llena de momentos y experiencias que producen diferentes estados de ánimo en las personas. La felicidad, el enojo, la angustia, la tristeza y la preocupación pueden ser de las principales respuestas anímicas que se experimentan ante las vivencias.

La persona se preocupa porque no va a llegar a tiempo, porque los víveres han incrementado de precio, porque no tiene suficiente dinero para pagar la colegiatura, porque un familiar querido está enfermo o, simplemente, porque hoy todo le está saliendo mal.

Sin embargo, se le olvida su fe y que, a través de ella, debe confiar en que llegará una solución a todas esas situaciones. El católico sabe esperar, confía y, sobre todo, sabe que Dios no lo abandona.

Fe y confianza en Dios

Por lo tanto, hay que reconocer cinco razones muy importantes para no preocuparse y confiar en que todo estará bien.

1. Dios siempre caminará con la persona, tal y como se establece en Mateo 28:20, "Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo." Hay que hacer énfasis en la parte «todos los días» porque ahí se indica claramente que Dios jamás abandona, ni en la situación que se pueda considerar la peor vivida.

2. Dios luchará por la persona, como se indica en Éxodo 14:14, "Yahveh peleará por vosotros, que vosotros no tendréis que preocuparos." El católico debe estar firme en su fe y saber que el único que puede pelear por, defender a, y sacar adelante a la persona de cualquier situación es Dios.

3. Dios recuerda el nombre de cada persona, según escribe Isaías en 43:1, refiriéndose a lo que dijo Yahveh, "No temas que yo te he rescatado, te he llamado por tu nombre. Tú eres mío." ¿Para qué temer y preocuparse, si Dios sabe cómo se llama cada persona que existió, que existe y que existirá? Él llama a la salvación, Él rescata a cada quien de sus tribulaciones, llamándole por su propio nombre.

4. El plan de Dios es mejor que el plan personal, de acuerdo con Jeremías 29:11, "...que bien me sé los pensamientos que pienso sobre vosotros, pensamientos de paz, y no de desgracia, de daros un porvenir de esperanza." Esto sugiere que la persona debe procurar mantener pensamientos y planes positivos, en lugar de negativos, para poder guiar su vida bajo el plan de Dios. Bien se dice que "el hombre propone y Dios dispone", porque Dios lo hace de acuerdo con lo que Él ya tiene previsto para cada quien y que solamente es lo mejor.

   
   

5. Dios es el refugio fuerte de cada persona, como queda asentado en el Salmo 62:6-8, "En Dios sólo descansa, oh alma mía, de Él viene mi esperanza; sólo Él mi roca, mi salvación, mi ciudadela, no he de vacilar; en Dios mi salvación y mi gloria, la roca de mi fuerza. En Dios mi refugio." No hay más lugar o persona que Dios en donde el alma pueda descansar, sentirse en paz, refugiarse, llenarse de fuerza para seguir adelante. Sólo Dios da todo eso. No vale la pena andar buscando en tendencias, modas, falsos ídolos, artistas, incluso vicios que enajenan, si todo se tiene al alcance de una oración dirigida a Dios con todo el corazón y alma.

Entonces, ¿para qué preocuparse? Si la persona cree y confía en que Dios le ama y lo salvará, entonces no tiene de qué preocuparse...menos aun conociendo estas cinco razones.