Pbro. Alfonso Romero Chávez
Colaborador | Navegando
Desde marzo del 2020, la vida de la familia López dió un giro inesperado ante la pandemia, situación que dejó al mundo importantes retos que nunca imaginamos tener a lo largo de nuestra vida.
Fernando y Carmen López narran su paso en este tiempo de pandemia.
Ante esta situación el señor Fernando y su esposa Carmen vieron con ojos de fe este terrible acontecimiento que vivía el país, que ha dejado un gran número de muertes y algunas familias destruidas pero otras fortalecidas por la Fe en Dios.
La familia comentó que “ no sabemos cuándo llegará esto a su fin y agregó que “ ya se perciben los estragos económicos, políticos y sociales”
En casa: Primero el miedo al contagio y después el temor a infectar a la familia.
Segundo, el morir, perder seres queridos, miembros de la familia, incluso a la familia completa. Con el paso del tiempo, se ha aprendido a tener los cuidados necesarios y se ha ido perdiendo el miedo, aunque también se han relajado mucho los cuidados.
Se ha aprendido a ser más cuidadosos, también a identificar que la limpieza es esencial en nuestras vidas, nos hemos enseñado a cuidar nuestros hogares y nuestra persona misma.
En Familia: Nuestras reuniones son menos frecuentes presencialmente, y cuando se llevan a cabo, se siguen todas las medidas de precaución. En un principio se suspendieron todo tipo de reuniones, causando mucha ansiedad. Hoy ya se aceptan las reuniones, aunque se evitan los saludos de mano, abrazos, besos, entre otras cosas.
Muchas familias utilizan las redes sociales para tener sus reuniones, aunque no es lo mismo, necesitamos vernos. De las cosas positivas que ha traído esta pandemia es la oración en familia, ya sea presencial o virtual, pero es algo que antes no se hacía. También hemos vuelto a los juegos de mesa y a las comidas familiares, incluso a reunirse a ver películas. Se han formado muchos grupos virtuales para rezar el Santo Rosario o para hacer operaciones de alabanza o de cualquier tipo.
Vida Social: Socialmente a todos ha afectado, especialmente los niños, pues el encierro los alejó de sus compañeros y del deporte, ya no interactúan con los demás, el recibir las clases virtuales provoca muchos problemas, pues la gran mayoría de ellos las reciben por medio de celular y no es el instrumento adecuado, provocando problemas en la visita y distracción, no se pueden concentrar, en algunos casos las mamás han entrado en su auxilio, pero no todas tienen la preparación o el tiempo.
En lo económico: Muchas personas han perdido sus trabajos y ha encarecido mucho las cosas, pero esto ha provocado que muchas personas desarrollen sus cualidades artesanales o culinarias y así han salido adelante.